A lo que me refiero, cuando hablo de liberación total, es al fin de toda forma de dominación tanto de la Tierra como de todas las especies, ya sean animales humanos como nosotrxs y no humanos también como lxs que este sistema capitalista y especista (1) busca poner en nuestros platos de comida. Soy un/a individuo/a que en cierta etapa de mi vida opte por la alimentación vegana (2), y que hasta el día hoy firmemente mantengo y no pretendo dejarla, pero desde que comencé esto a la fecha, he pasado por un proceso bastante nutritivo en cuanto a rabia al sistema. Inicialmente elimine los productos de origen animal por la empatía que me produjo enterarme la cruel opresión y explotación que viven los animales en las granjas de “producción” de carne y entender que más allá de la tortura, no tengo porque consumir un animal comprado habiendo una alternativa que tampoco considero que sea el vegetal comprado, sino en mi caso cultivado. Con el pasar del tiempo, la empatía por los animales ya no fue la razón que más afirmaba mi practica del veganismo, sino se acercaban más aquellas que involucraban a una industria capitalista que pretende hacer de seres vivos, meras mercancías y entendí que lo que busque en sus inicios, la liberación animal, es totalmente complementario con la liberación de nuestra especie y lxs que nos explotan a nosotrxs, son los mismos que explotan a los demás animales.

Con este texto, me gustaría con mucho cariño, llegar aquellxs compañerxs que buscan la liberación solo humana, y olvidando como dije al principio, que nuestrxs enemigxs son lxs mismxs que matan a los animales. Y compañerxs, ustedes les están comprando seres muertxs a esos malditxs asesinxs, no me refiero a los carnicerxs, no se confundan, ellxs no son nuestrxs enemigxs, me estoy refiriendo a la clase empresarial que mantiene la gran industria de la carne, esxs son nuestrxs enemigxs, la misma clase autoritaria y opresora que nos explota a nosotrxs y a las demás especies.

Todxs, caminemos con rabia, amor y odio hacia la liberación total, porque ya no aguantamos que ninguna especie sea explotada por el mismo enemigo de hace siglos; la autoridad, porque no aguantaremos ver como aquellxs le siguen poniendo precio a la Tierra.

Notas:
(1) Discriminación moral basada en la diferencia de especie animal, en analogía con el racismo o el sexismo entre los humanos está basado en diferencias físicas moralmente irrelevantes. La discriminación especista presupone que los intereses de un individuo son de menor importancia por el hecho de pertenecer a una especie animal determinada. Esta discriminación es una actitud bastante arraigada en todas las culturas. La representación más común del especismo es el antropocentrismo moral, es decir, la infravaloración de los intereses de quienes no pertenecen a nuestra especie animal homo sapiens.

(2) El veganismo es una alimentación basada en el no consumo de cualquier producto de origen animal (huevos, lácteos, carne, etc.).