Los acuarios para los animales marinos son unas verdaderas cárceles acuáticas que pretenden imitar el entorno del habitad natural. En un acuario se pueden encontrar diversos tipos de animales como leones marinos, delfines, tiburones, rayas, entre muchos otros.

El delfín es uno de los ejemplos mas claros donde se puede ver lo estresante que es estar encerrado (para todo ser), puesto que ellos usan eco de los ultrasonidos para orientase en el agua pero estar encerrado, es tan torturante que terminan volviéndose locos; pero no porque ellos tengan una sonrisa en su cara siempre quiere decir que están felices porque es solo un rasgo facial que incluso cuando este sufriendo o muera lo tendrán.

Jacques Cousteau afirmó que la vida para un delfín en cautividad «le lleva a la confusión de todos sus sentidos, que a la larga le causa a alguien tan sensible una terrible cambio de todo su comportamiento y hábitos».

Pero los delfines no son los únicos que sufren, todo animal sufre encarcelado, sea en mar o tierra, los peces pequeños que a muchos niños y adultos les gusta tener en casa encerrados también sufren grandes daños que producen cambios severos en el comportamiento y padecimiento. Las mayoría de los peces crean mapas para poder guiarse en mares y océanos los que no pueden utilizar en un acuario y esto hace que sufran inmensos daños sicológicos como lo es el comunicarse porque como sabemos se comunican por medio de sonidos, luces, olores, etc.

Pero también terrible para estos animalitos es que es tal difícil controlar la temperatura del agua que muchos mueren porque no todos necesitan la misma temperatura como también los químicos con los que lavan los acuarios les dañan los ojos y la piel lo que hace que sus vidas sean aun mas dolorosas.

Para lograr salvar las vidas de los animales que tanto muchos amamos y que viven encerrados, enjaulados por culpa del hombre y solo por lucrar con sus vidas a costa de sufrimiento y crueldad debemos no acudir a estos recintos, ya sea circos con animales, acuarios, zoológicos, etc.; ni tampoco contribuir a ellos comprando acuarios y mascotas (marcotas adoptando), si queremos aprender de ellos solo basta buscar en Internet, o libros. Porque nosotros somos los únicos que podemos acabar con esta crueldad, sin el dinero de las personas estos recintos acabarían.

Dejemos que las demás especies vivan en donde deben estar.