Archivo de la categoría: Análisis

>Los daños que involucran el embalse Punilla en San Fabián, Chile

>

San Fabián es un poblado de 3700 habitantes, ubicado en la Precordillera de la Provincia de Ñuble, Región del Bío Bio, Chile en las faldas de dos imponentes cerros, el Alico, de 1200 metros de altura, y el Malalcura, de 2100 metros.
El territorio de San Fabián desde la mitad de la plaza central hacia la cordillera, se encuentra dentro de los límites del Corredor Biológico Nevados de Chillán, Laguna del Laja (Corredor Biológico), hasta hoy única figura que otorga resguardo legal a esta área natural.

En esta comuna existe un proyecto denominado Embalse Punilla impulsado por el Ministerio de Obras Públicas como parte del sistema de riego del canal Laja-Diguillín en construcción. Este tiene fuertes repercusiones ecológicas, ambientales, patrimoniales, afectando a las posibilidades de desarrollo local sustentable y sostenible. Además del impacto en el patrimonio arqueológico por la pérdida de 11 sitios indígenas y afectar a un sitio prioritario para la conservación de la biodiversidad debido a la inundación de 690 hectáreas de bosque nativo.

La Comisión Regional Medioambiental (COREMA) mismos que hace unos meses dieron el si a la ya rechazada termoeléctrica en Punta de Choros, aprobaron de manera unánime el proyecto del Embalse Punilla, no importando conservar la comuna de San Fabián de Alico como una reserva para la biosfera, debido a su gran potencial en flora, fauna, paisaje y cultura pehuenche con vestigios históricos, aún desconocidos.

-Información obtenida del Movimiento contra el embalse Punilla
-Fotografía: Marcha ciudadana contra el embalse Punilla en Chillán, Chile

>Coleo, ¿tradición o tortura?

>

“El coleo de toros es un “deporte” que tiene un origen emparentado con la ganadería en Venezuela desde mediados del siglo XVI. Con la formación de hatos ganaderos, era muy común atrapar a los toros que se escapaban de la manada, atrapándolos por el rabo hasta hacerlos derribarlos. El coleo se establece como práctica del hombre de los llanos hacia 1780, así lo demuestran algunas quejas que censuraban la costumbre.”
Actualmente la finalidad de este mal llamado deporte es tumbar al Cebú /toros ó becerros cuando este sale a la manga, en Venezuela, son 4 coleadores los que salen detrás de el becerro/cebú ó toro, buscando tirarle al piso o como ellos llaman “Colearle” que usualmente se hace jalando la cola, la cual genera lesiones en el animal que fue coleado o en el mismo que usan como transporte de coleo.

En las vacas/toros ó becerros generan daños en la columna vertebral al momento de jalarle la extremidades como la cola, fractura en las patas traseras como delanteras, raspones, magulladuras, golpes ya que en algunos casos el caballo “atropella” a la Cebú /toro ó becerro.

Los caballos a pesar de no ser coleados, sufren millones de lesiones también, al colisionar con otros “competidores” o con el mismo Toro/Cebú o becerro causándole diversas fracturas en algunas partes de su cuerpo.

Estos animales son provenientes de las granjas cárnicas y solo son un instrumento de ocio, sadismo y mal llamado disfrute de algunos pocos, ya que la población venezolana rechaza contundentemente este clase de espectáculo, pero el mismo se mantiene por ciertas mafias e intereses ajenos a los animales, es un eslabón más de tortura, agonía en la cadena hacia la muerte, estos animales son transportados por los mismos camiones que los llevan a los mataderos, confinados, apretados, enfermos, golpeados, asustados son llevados a la manga de coleo donde luego de ser maltratados, golpeados, derrumbados, son llevados a jaulas durante toda la noche, que al empezar el nuevo día, serán llevados al matadero, donde serán asesinados, mutilados para el disfrute de un paladar.