Archivo de la categoría: veganismo

>El veganismo no se impone, se difunde y se sugiere

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La imposición (casi violenta) del veganismo como forma de vida, es uno de los errores más comunes dentro de los movimientos por los derechos de los animales, lo que me parece bastante criticable ya que el veganismo nace como consecuencia y protesta hacia la dieta de productos de origen animal, que el sistema especista nos impuso desde el momento en que nacemos. No todos en esta sociedad han decidido modificar la alimentación. Algunos no lo han hecho por desconocimiento, otros por falta de dinero (para una dieta que en algunos sectores lo necesita), otros por falta de medios y aceptación familiar, sea la razón que sea, todas son validas, criticables y debiesen ser respetadas por todo el movimiento por los derechos de los animales pero lamentablemente muchos de ellos se han encargado de convertir a quienes consumen productos de origen animal en personas “malas” y a los veganos en personas “buenas”. Lo que me parece chistoso, irreal y burlesco, pero también me da pena porque esta forma de difundir la igualdad animal y por consecuencia el veganismo, ensucia la verdadera lucha contra el especismo que no debiese recurrir ni a la burla, ni a la imposición, ni al egoncentrismo.Yo soy vegano porque lo considero una protesta directa hacia la industria alimenticia además de ser una forma de desobediencia a lo que el sistema impone y es una postura consecuente con mis principios de libertad. No todos lo son por la misma razón que yo, están los que lo son por los derechos de los animales, los por salubridad personal y quienes lo son por reconocimiento publico momentáneo y después dejan de serlo.
Pero creo que a todos nos une algo, la lucha contra el especismo pero no esa que busca respetar derechos que ni en nuestra propia especie son respetados, sino esa que busca la libertad de todos los animales (incluyéndonos).
Para luchar con consecuencia no usemos los medios que el especismo uso para instalarse en la sociedad.

>Estudio revela el mayor riesgo de sufrir cáncer esofágico y estomacal en los consumidores de carne

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Recientes resultados de un estudio, publicados en la revista “American Journal of Gastroenterology”, dieron por revelado qué aquellas personas qué consumían más carne tenían un 79% de ser más propensas a desarrollar cáncer esofágico. Los consumidores de carne tienen más posibilidad de desarrollar ciertos cánceres de garganta y estómago qué quienes son vegetarianos o veganos. Esto revela reciente estudio.

El equipo encargado de la investigación halló entre casi 500.000 adultos mayores en Estados Unidos, estudiados durante una década, que una pequeña cantidad desarrollo tumores de esófago o el estómago. Pero los riesgos eran relativamente más altos en los que consumían más carnes rojas o ciertos compuestos de la cocción.

Los participantes del 20% que más carnes rojas consumían, eran un 79% más propensos que los del 20% que menos carnes consumían, a desarrollar carcinoma estomacal de células escamosas, un cáncer que ataca el tejido de la parte superior del esófago. En tanto, el riesgo de desarrollar un tipo de cáncer en la parte superior del estómago cerca del esófago (cardias gástrico) aumentó en los hombres y las mujeres con el mayor consumo de una forma de aminos heterocíclicos (HCA, por sus siglas en inglés).

Una revisión del 2007 realizada por el Fondo Mundial de Investigación del Cáncer y del Instituto Estadounidense de Investigación del Cáncer, dos instituciones sin fines de lucro, concluyeron que las carnes rojas y procesadas estuvieron asociadas con «un aumento limitado y sugestivo del riesgo» de desarrollar cáncer esofágico.

El informe revela también un mismo nivel de evidencias de la relación entre las carnes procesadas y el cáncer estomacal, y datos insuficientes sobre la relación entre su consumo y el cáncer.

Con todo, la mayoría de los estudios revisados eran caso-control. Este tipo de estudios proporcionan sólo evidencias limitadas si una determinada exposición, como la carne roja en la dieta, está asociada con el riesgo de desarrollar alguna enfermedad, explicó la doctora Amanda J. Cross, del Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos.
Los estudios prospectivos, que siguen a personas sanas en el tiempo, aportan pruebas más sólidas.

Además, la mayoría de los estudios previos no analizaron el consumo de carne y los distintos subtipos de cánceres esofágicos y estomacales. Eso, dijo Cross a Reuters Health, es importante porque esos subtipos tendrían distintos factores de riesgo.

De modo que para el estudio, el equipo de Cross siguió prospectivamente a 494.979 adultos de Estados Unidos de entre 50 y 71 años durante una década.

Al inicio, los participantes respondieron cuestionarios detallados sobre su alimentación, incluidos los métodos utilizados para cocinar la carne y el nivel de cocción preferido, además de factores del estilo de vida.

En esa década, 215 participantes desarrollaron carcinoma esofágico de células escamosas: 28 casos en el 20 por ciento que menos carne consumía y 69 casos en el 20 por ciento que más consumía.

A otros 454 hombres y mujeres se les diagnosticó cáncer del cardias gástrico: 57 casos entre los que menos carne consumían y 113 en el grupo que más consumía.

Tras considerar otros factores (edad, peso, tabaquismo y ejercicio), los participantes que más carne comían eran un 79 por ciento más propensos que los que menos consumían a desarrollar carcinoma esofágico de células escamosas.La carne roja no estuvo asociada con la aparición del cáncer del cardias gástrico, pero para un tipo de HCA (DiMelQx) los participantes del 20 por ciento que más carne consumía tenían un 44 por ciento más riesgo de desarrollar ese cáncer que el grupo del 20 por ciento que menos carne comía.

La carne roja tampoco estuvo claramente asociada con el adenocarcinoma de esófago, que aparece en las células glandulares del esófago bajo y es la forma más común en Estados Unidos, o con cánceres en otras partes del estómago (no cardias gástrico).

La Sociedad Estadounidense del Cáncer estima que en el 2010 se diagnosticarán 21.000 casos de cáncer estomacal y 16.640 casos de cáncer esofágico.